Entramos en un otoño un tanto extraño a la par que caluroso, y a mi por lo menos no me llama la atención preparar bocaditos de bollería típicas de la época especialmente especiadas o cargadas de rellenos y coberturas, así que en este mes por el reto #panesxelmundo vamos a viajar a un país donde ahora mismo es primavera y parece que el clima es más apacible, y al menos nos transportamos por unos minutos a una terraza fresca en pleno centro de Santiago de Chile y compartimos este rico bollito de delicada miga y mejor sabor.
Puedes acompañar los bocaditos de dama con tu infusión favorita o con un batido helado como merienda de cualquier tarde de primavera o verano.
Tenía esta receta en la recamara desde hacia unas semanas y me llamó la atención por su característico formato en rollo que se aprecia en las fotos; pero no deja de ser una masa dulce y enriquecida con mantequilla y leche muy similar a la que preparamos para hornear un pan de molde o unas medias lunas. Por eso me picó la curiosidad de ver como quedaría el bocadito al «partir» la porción por la mitad ¿me acompañas y lo vemos?
Ingredientes para unos 8 o 9 bocaditos de dama:
-La masa:
- 500 g de harina de fuerza
- 260-270 g de leche entera o la que uses
- 10 g de leche en polvo
- 30 g de mantequilla
- 30 g de azúcar blanco
- 8 g de sal
- 7 g de levadura
-Para el acabado final:
- Aceite suave para pincelar
- Yema de huevo para pintar
- instrumento para «partir» el bollo
Elaboración de los bocados de dama:
Esta masa es realmente sencilla de preparar así que solo vamos a tener que mezclar todos los ingredientes de la lista, menos la mantequilla. Usa un bol de amasado o tu robot de cocina que te hará la tarea más sencilla aún. Una vez todo mezclado y consigas una masa cohesionada, haz la comprobación de la membrana y añade entonces la mantequilla para que se integre en la masa.
Este último paso te llevará unos minutos en la amasadora a velocidad mínima o un rato más de trabajo si lo haces a mano. Cuando la preparación este completamente amasada, déjala reposar unos 30 minutos para poder estirar y manejarla mejor. Es una masa muy maleable y similar a la de un pan de molde.
La podrás estirar sin mayor dificultad con un rodillo de repostería. Cuando tengas un rectángulo de masa de unos 40×50 centímetros pincela con el aceite toda la plancha y comienza a enrollar por el lado más ancho sellando bien cuando llegues al final de la masa. Deja reposar un rato más en lo que preparas un palo de madera o similar del grosor de un dedo. Con esa herramienta daremos el formato tan característico de este delicado bollo. En mi caso use una chaira, esa herramienta de cocina con forma de palo metálico que se usa para afilar cuchillos. Te servirá una brocheta de madera gruesa.
Ahora divide el rollo en porciones de 6 o 7 centímetros de grosor y colócalos en la bandeja de hornear con el cierre hacia abajo. Finalmente, engrasa el palo que hayas amañado para el toque final y marca cada bollo en medio presionando el palo hasta llegar a la base, sin miedo. Deja reposar entre 90 minutos y dos horas hasta que veas que han duplicado su tamaño y este perfectos para hornear.
Con el horno precalentado a 200ºC, pincela tus bocaditos de dama y hornea con calor a ambos lados hasta que estén dorados. El hecho de enrollar la masa y marcarla en medio hace que la miga se deshaga como en capas.
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